Bizcocho Clásico Esponjoso

Bizcocho Clásico Esponjoso

Introducción

El bizcocho clásico es una de esas recetas que nunca pasan de moda. Es perfecto para cualquier

ocasión, ya sea un cumpleaños, una merienda con amigos o simplemente para disfrutar con una taza

de café o té. Este bizcocho esponjoso y delicioso se caracteriza por su textura ligera y su sabor suave,

que lo hacen ideal para disfrutar solo o acompañado de frutas, mermeladas o cremas.

Ingredientes

1 taza de harina para todo uso

1 taza de azúcar

1/2 taza de mantequilla, a temperatura ambiente

4 huevos grandes

1/2 taza de leche

2 cucharaditas de polvo de hornear

1 cucharadita de extracto de vainilla

Una pizca de sal

Instrucciones

Preparar la masa

Precalentar el horno: Precalienta tu horno a 180°C (350°F). Engrasa y enharina un molde para

bizcocho redondo de 20 cm (8 pulgadas) o forra el fondo con papel pergamino.

Batir la mantequilla y el azúcar: En un bol grande, bate la mantequilla y el azúcar hasta obtener una

mezcla esponjosa y pálida.

Añadir los huevos: Agrega los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición para

asegurar que se integren completamente.

Mezclar los ingredientes secos: En un bol aparte, tamiza la harina, el polvo de hornear y la sal.

Añadir los ingredientes secos y la leche: Incorpora la mezcla de harina a la mezcla de mantequilla y

azúcar, alternando con la leche. Comienza y termina con los ingredientes secos. Mezcla solo hasta que

estén bien incorporados.

Añadir la vainilla: Agrega el extracto de vainilla y mezcla ligeramente.

Hornear el bizcocho

Verter en el molde: Vierte la masa en el molde preparado y alisa la superficie con una espátula.

Hornear: Hornea durante 30-35 minutos o hasta que un palillo insertado en el centro del bizcocho

salga limpio.

Enfriar: Deja enfriar el bizcocho en el molde durante unos 10 minutos. Luego, desmóldalo y déjalo

enfriar completamente sobre una rejilla.

Servir y disfrutar

Cortar y servir: Una vez que el bizcocho esté completamente frío, córtalo en porciones y sirve.

Puedes acompañarlo con una taza de café, té o tu bebida favorita.

Acompañamientos opcionales: Este bizcocho también se puede disfrutar con una capa de azúcar

glas espolvoreada por encima, con frutas frescas, mermeladas, o incluso con una capa de crema

batida.

Conclusión

Este bizcocho clásico esponjoso es una receta sencilla pero deliciosa que seguramente se convertirá

en una de tus favoritas. Su textura ligera y sabor suave son perfectos para cualquier ocasión, y es tan

versátil que puedes personalizarlo con tus acompañamientos favoritos. ¡Anímate a probar esta receta

y disfruta de un delicioso bizcocho casero!