Rodajas de Calabacín Empanizadas y Fritas

Rodajas de Calabacín Empanizadas y Fritas

Introducción

Las rodajas de calabacín empanizadas y fritas son una deliciosa y crujiente opción para disfrutar como

aperitivo, guarnición o incluso como un plato principal vegetariano. Con su exterior dorado y su

interior suave, son una verdadera tentación para cualquier amante de la comida frita. En esta receta,

te mostraremos cómo preparar estas deliciosas rodajas de calabacín de manera fácil y rápida.

Ingredientes

2 calabacines medianos

1 taza de harina para todo uso

1 taza de pan rallado

1/2 taza de queso parmesano rallado

2 huevos grandes

1/2 taza de leche

Sal y pimienta al gusto

Aceite vegetal para freír

Instrucciones

Preparación de los Calabacines

Lava bien los calabacines y córtalos en rodajas finas, aproximadamente de 1/4 de pulgada de grosor.

Coloca las rodajas de calabacín sobre papel absorbente y espolvorea sal sobre ellas. Deja reposar

durante unos 10 minutos para que suelten parte de su humedad. Luego, seca las rodajas con más

papel absorbente.

Preparación de la Mezcla para Empanizar

En un plato hondo, coloca la harina y sazona con una pizca de sal y pimienta.

En otro plato hondo, bate los huevos junto con la leche hasta obtener una mezcla homogénea.

En un tercer plato, mezcla el pan rallado con el queso parmesano.

Empanizado de las Rodajas de Calabacín

Pasa cada rodaja de calabacín por la harina, cubriéndola bien y sacudiendo el exceso.

Luego, sumérgelas en la mezcla de huevo y leche, asegurándote de que estén bien cubiertas.

Finalmente, pasa las rodajas por la mezcla de pan rallado y queso parmesano, presionando

ligeramente para que el empanizado se adhiera bien.

Freír las Rodajas de Calabacín

En una sartén grande, calienta suficiente aceite vegetal a fuego medio-alto hasta que alcance una

temperatura de 175°C (350°F).

Fríe las rodajas de calabacín en tandas, evitando sobrecargar la sartén. Cocínalas durante unos 2-3

minutos por cada lado, o hasta que estén doradas y crujientes.

Retira las rodajas de calabacín de la sartén y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso

de aceite.

Servir

Sirve las rodajas de calabacín empanizadas y fritas inmediatamente, acompañadas de tu salsa favorita.

Algunas opciones populares incluyen salsa marinara, alioli, o una salsa de yogur con hierbas.

Conclusión

Estas rodajas de calabacín empanizadas y fritas son una opción deliciosa y versátil que seguramente

encantará a todos. Son perfectas para una reunión con amigos, una cena familiar o simplemente para

disfrutar como un snack crujiente. ¡Anímate a prepararlas y disfruta de su increíble sabor y textura!